top of page

El miedo… ¿Cómo nos afecta? Y ¿Qué podemos hacer con él?

  • Psic Maribel Pesqueira
  • 21 ago 2017
  • 4 Min. de lectura

En muchas etapas de mi vida tuve miedo, de niña cuando me iba a la cama a dormir, me producía miedo el que apagaran las luces porque creía, resalto la palabra creer, que saldría algún monstruo que vendría por mí, algún fantasma, o cualquier cosa fuera de este mundo; pero no era los únicos miedos que tenía, tenía miedo a subirme a un árbol y caerme, miedo a que al meterme al mar me ahogara, miedo a reprobar alguna materia, y aún tengo miedo a las cucarachas, en fin se puede decir que todas las personas tienen miedo a diferentes cosas.

Entonces

¿Qué es el miedo?

El miedo es una emoción primaria, ya que es una emoción básica, que aporta un mecanismo de supervivencia para vivir con seguridad y adaptándonos al entorno. El miedo nos sirve de aviso para cuando nos sentimos amenazados por un factor externo y nos indica que debemos accionar para evitar ser lastimados, por ejemplo, el miedo cuando transitamos por una calle sin iluminación y nos señala que mejor tomemos otra calle que tenga mejor iluminación para evitar ser asaltados o ser lastimados por alguna obstáculo que no veamos. El problema de tener miedo es que puede afectar nuestra vida, paralizándonos para poder actuar y quedándonos muchas veces quietos y no arriesgarnos a accionar, a este tipo de miedo se le llama disfuncional.

Los miedos disfuncionales ocurren ante hechos que no son peligrosos pero creemos que lo son, y otra vez volvemos a la palabra creer… más tarde comentaré sobre esto de las creencias.

Junto al miedo disfuncional nacen los pensamientos negativos e irreales que nos dicen que nos paralicemos que no actuemos, que nos quedemos en el mismo sitio, con las mismas personas, el mismo trabajo, la misma pareja, en fin, no nos movemos hacía un cambio hacia una nueva vida u oportunidad

La mayoría de los miedos disfuncionales son creencias que se han arraigado en nuestra mente de eventos o sucesos que nos han pasado y que generaron experiencias no gratas y que para no volver a repetirlas se convierten en emociones de miedo disfuncional las que nos paralizan a no actuar para no volver a experimentar lo pasado, pero que no tenemos la certeza de que estos eventos presentes tendrán las mismas experiencias pasadas y por lo tanto para no vivir lo pasado nos detenemos y no actuamos para modificar nuestro presente.

Pero también “El miedo puede convertirse en tu aliado”… Pero ¿Cómo?

Niveles de miedo

1.- Temor = Nos avisa que estemos alertas ante un posible potencial de peligro

2.- Fobia= Nos paraliza, no nos permite accionar, nos bloquea y nos deja en el mismo sitio

3.- Ataque de pánico= Aparte de que nos paraliza genera una sensación extraña, una sensación de ansiedad

Lo podemos interpretar como un semáforo:

Rojo= Estoy paralizado, quieto, sin acción= Miedo disfuncional

Amarillo= ¿Cómo distinguir? ¿Es amenaza real o es imaginaria?

Verde= Comienzo a moverme, salgo de donde estoy, acciono= Me permite elegir

¿Entonces qué podemos hacer?

Todos tenemos miedo y eso no lo podemos evitar, ya que es una emoción que se gatilla inmediatamente para prevenirnos de una posible amenaza, la cual está en nuestro poder identificar si es real o imaginaria, para así decidir qué acción tomar.

¡No tengas miedo del miedo!

Una de las medidas que podemos tomar para evaluar si podemos afrontar la situación que tenemos miedo es analizar la balanza de amenazas- recursos

Es decir que tipo de amenaza representa y que recursos tenemos para afrontarla, si los recursos que tenemos son más que la amenaza entonces podemos enfrentarla.

Ejemplo:

Vamos a cruzar una calle con alto tráfico vehicular, nos da miedo, ya que sabemos que podemos ser atropellados por un vehículo y quizá ser heridos o en su caso más extremo morir, nos paraliza el cruzar por el miedo… entonces

Analizamos lo siguiente

Amenazas: Transito de vehículos a alta velocidad

Calle muy amplia como para cruzar rápidamente

Recursos: Tomar el puente peatonal

Esperar la luz verde del semáforo peatonal

Esperar que no haya tráfico en la calle

Cuando las opciones de recursos son mayores que las amenazas tenemos opciones para enfrentar el miedo y entonces accionamos y dejamos de tener un miedo disfuncional a uno funcional que nos permita movernos de donde estábamos originalmente y llegar a donde queremos.

¿Cómo convertir el miedo en aliado?

Haciéndonos las siguientes preguntas:

  • ¿El miedo me protege?... Es decir, esa emoción me está avisando que me puede pasar algo a mi persona y por lo tanto tengo que tomar las acciones para protegerme

  • ¿Me avisa?... Me alerta que algo de mi entorno se ha vuelto amenazante y me pone en alerta

  • ¿Me sugiere?... Me dice que debo tomar acciones para evitar la amenaza, me dice que me mueva, que haga algo al respecto

  • ¿Me cuida?... Me dice que sí la amenaza es real tengo que cuidarme para no ser herido, lastimado

  • ¿Me abraza?... es decir es una emoción de protección y no de parálisis, me hace tomar acción para mi bien y no quedarme anclado en el miedo

  • ¿Me alerta?... Me indica que analice si es amenaza real o imaginaria

En resumen

Nunca dejaremos de tener miedo es algo primario que está avisándonos de algún peligro eminente. Lo que si podemos hacer es identificar si esté peligro es real o imaginario y convertir el miedo de disfuncional a uno funcional que nos señale que necesitamos actuar o reinterpretar las amenazas.

Referencias bibliográficas

Echeverría R

Ontología del Lenguaje

Ed. Granica


 
 
 

Comentarios


Entradas destacadas
Vuelve pronto
Una vez que se publiquen entradas, las verás aquí.
Entradas recientes
Archivo
Buscar por tags
Síguenos
  • Facebook Basic Square
  • Twitter Basic Square
  • Google+ Basic Square
Citas: (477) 30 60 700/ Medica campestre

© 2023 Medical Clinic. Proudly created with Wix.com

  • w-facebook
  • White Google+ Icon

lunes -  Viernes     8:00 am - 8:00 pm
Sábado                      9:00 am - 1:00 pm
Sunday                      Closed

Pesqueira

Psicologa Clinica

bottom of page